miércoles, 16 de marzo de 2016

Maratón Messier 2016

El pasado 12 de Marzo los miembros de la  Asociación Daimieleña de Astronomía, tuvimos una cita importante en el paraje conocido como "las salinas" de esa localidad manchega: el maratón Messier. No hay que decirle nada a ningún aficionado acerca de la importancia de esa noche para nuestra afición, y a buen seguro que mas de uno se acordará de la primera vez que asistió, tal y como era para mi ese día.

Antes de que anocheciera ya estábamos preparados en el lugar de observación, listos para montar los equipos a pesar de las muchas nubes que cubrían casi totalmente el cielo, pero con la esperanza de que lo que auguraban las predicciones meteorológicas terminara de cumplirse. Así fue, ya que aunque la sesión se iniciara con bastantes nubes que nos hicieron perder los primeros objetos de la noche, al final se quedó un cielo óptimo para la práctica de la observación astronómica y poco a poco fuimos encontrando objetos.

Preparando la observación
He de decir que personalmente no fui con el ánimo de completar la lista, es mas, creo que nunca llegaré a realizar el maratón pues prefiero detenerme con cada objeto y disfrutarlo al menos unos minutos, pero al principio entre todos fuimos a buen ritmo al repartirnos el "trabajo" entre los telescopios montados.  De los primeros en caer me quedo con M1 en un dobson de un compañero de asociación, nebulosa que desde mi terraza resulta poco disfrutable y que en su telescopio pude ver perfectamente. Cierto es que en algunos cúmulos abiertos, como los de Auriga, usamos unos potentes prismáticos 20x80 que posee nuestra asociación, pero me reafirmo en mi opinión de rechazar el reto y quedarme con una agradable noche de observación, cumpliendo con la tradición de la misma pero de forma tranquila.

Quedé contentísimo del rendimiento de mi refractor 102mm y f/9 en espacio profundo, que con sus limitaciones, me posibilitó ver objetos como M101 que desde mi pueblo son totalmente imposibles, o M51, galaxia que sin ningún género de dudas es la vez que mejor la he visto. Tras localizar los objetos messier en la constelación de Leo y justo cuando me disponía abandonarla, me pareció incluso detectar algunas de las galaxias mas asequibles del catálogo NGC que andan por allí. Estaría bien hacer pronto otra salida y probar mi telescopio por esa zona de cielo. Hubo varios objetos a los cuales me hubiera gustado meter mas aumento, como por ejemplo M94, cuya luminosidad esa noche me dejo perplejo y que merecía algún ocular mas potente en busca de mas detalles, pero decidí seguir el maratón hasta donde se pudiera y dejarlo también para otra ocasión.

También disfrute bastante del bonito mano a mano de mi refractor 102mm y un newton 150mm de otro compañero, telescopio por el que miré bastante y pude comparar con el mio. Francamente me pareció que dependía de cada objeto cual de ellos se comportaba mejor, aunque la verdad, me encanta el contraste de las imágenes generadas por una lente en contraposición a la de los espejos.

Lamentablemente a eso de la 01:00h las ópticas empezaron a empañarse y hubo que recoger los equipos. En total fueron 41 los objetos encontrados. El año que viene si podemos volver a realizarlo, no estoy nada seguro de querer superar la marca, la táctica será similar a la de esta ocasión: ver lo que se pueda y disfrutar de la compañía y de la noche.

2 comentarios:

  1. Sin duda, oportunidades ideales para ver objetos de poca luminosidad superficial como M 101, bastante brillantes pero que en nuestro contaminado cielo cotidiano son invisibles.
    Yo al menos no he conseguido verla nunca con mis prismáticos 15x70, aunque sé perfectamente dónde está.

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    1. La verdad es que la diferencia fue brutal con M101... de la nada mas absoluta a una macha difusa pero observable en visión directa. En esos objetos es como tu bien dices, donde se nota lo contaminados que están nuestros cielos nocturnos.

      Un saludo.

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